lunes, 24 de febrero de 2014

Coleccionar

Algunas veces  se apodera de mí una curiosa e inquietante sensación: la imperiosa necesidad de coleccionar momentos. ¿Para qué? Para que siempre estén ahí. Para que cuando me sienta nostálgico, confundido, deprimido o simplemente me apetezca recordar, pueda abrir esa caja mágica y recordar los mejores y valiosos momentos de mi vida. ¿Por qué?Porque, a veces, tengo miedo de llegar a estar perdido. El miedo de perderle a esta vida el sentido. El miedo de cometer los mismos errores. El miedo de olvidar los pequeños detalles que te hacen vivir tan intensamente en tan solo unos instantes. Es entonces cuando me encantaría poder conservarlos hasta la muerte, sin ni tan siquiera perder un ápice de detalle. Pero como  por el momento no es posible, confiaré en mi memoria, un papel y un lápiz.

Datos personales